La Panadería Pastelería Sukkar, un tesoro de Tobarra y Albacete
En el corazón de Tobarra, un pueblo con aroma a tradición y masa bien amasada, se alza el templo de los dulces más codiciados de la comarca de Hellín y más allá: la Panadería Pastelería Sukkar. Este establecimiento, que también cuenta con una tienda en la ciudad de Albacete, es el reino de Salva, un maestro artesano panadero, pastelero cuya pasión por el arte de la panadería y la pastelería despierta los sentidos y alborota el espíritu de la época de Reyes como ninguno.
Salva es un narrador de historias a través de sabores y texturas; cada dulce surgido de sus manos es un capítulo que habla de dedicación y de una búsqueda incansable por la perfección. En su obrador, la Navidad se siente en el aire gracias al elixir de fragancias y en la presentación impecable de cada roscón de Reyes que sale al escaparate, esperando ser la protagonista de alguna mesa familiar.
Con la llegada de los magos de Oriente, quien trae consigo el verdadero milagro es Salva con sus roscones de Reyes. Sus creaciones son un viaje sensorial que comienza en el momento en que se seleccionan los ingredientes de altísima calidad – nunca menos – y continúa en el meticuloso proceso de fermentación natural, cocina y decoración respetuosa de la receta ancestral.
La harina más pura, los huevos de corral, el azúcar no refinado y la mantequilla más fresca se convierten en los pilares de un roscón que es, no solo un pastel, sino una obra de arte comestible. La mano de Salva teje con estos elementos una textura aireada y un sabor que rememora con cada mordisco a aquellos roscones de antaño, aquellos que sabían a hogar, a infancia, a felices reuniones familiares.
En Panadería Pastelería Sukkar, no hay cabida para las prisas ni para los atajos. Salva, con una sonrisa y la paciencia de los sabios, nos recuerda que los mejores placeres de la vida llevan su tiempo. Y es que, como él bien dice, “un buen roscón no solo se deleita con el paladar; se disfruta desde el primer destello de dulzura en la nariz, hasta el último suspiro de satisfacción”.
La excelencia de la Panadería Pastelería Sukkar no es un secreto, y por eso su fama trasciende las lindes de Tobarra y se expande hasta Hellín y toda la provincia de Albacete. Estos roscones son el alma de la temporada, una promesa de buenos deseos envuelta en la sabiduría de quien sabe que la mejor materia prima y el amor por la labor bien hecha son los ingredientes secretos para un año nuevo próspero y dulce.
Exprimir la magia de estas fechas es sencillo con el sabor tradicional que ofrece el renombrado Salva en la Panadería Pastelería Sukkar. Es una dulce invitación a comenzar el año con el pie derecho, y a asegurar que la dulzura de la vida, como la de un buen roscón de Reyes, nunca debe faltar.
