El alcalde afirmó que la pedanía contaba con todo el apoyo del Ayuntamiento, la Diputación y la Junta de Comunidades
Aunque la noticia ya se había adelantado oficiosamente, en la mañana de hoy, el alcalde de la ciudad, Ramón García, hacía pública la designación de la pedanía hellinera de Agramón como sede de las Jornadas de Exaltación del Tambor y el Bombo para el año 2019.
El primer edil, que mostraba su satisfacción por el logro, recordaba que hacía 15 años, en 2004 que ya Agramón había gozado de esta designación, apuntando que desde el año pasado, durante las Jornadas realizadas en Baena, se entró en contacto con los pueblos que formaban el Consorcio del Tambor para hacer patente el deseo de los habitantes de la pedanía, junto al apoyo del Ayuntamiento de Hellín, para esta nominación.
Por último Ramón García anunciaba que habría que ponerse a trabajar duro, ya que tendrían que reunir las mejores condiciones para recibir a los centenares de tamborileros y demás visitantes que llegarán en la primavera de 2019 a la pedanía hellinera de apenas 800 habitantes.
Por su parte el concejal de Turismo, Javier Morcillo, tras felicitar a la población de Agramón por el logro y sobre todo a la Asociación de Tamborileros, reiteró la necesidad de realizar un intenso trabajo en diferentes áreas para que los visitantes encontrasen, durante los tres días todo tipo de comodidades, “por ello había que echar toda la carne en el asador”.
Morcillo también quiso referirse a las posibilidades turísticas de esta zona, señalando la Pinturas Rupestres de Minateda y el Parque Arqueológico que, dijo, esperaba ya fuese una realidad.
Por último agradeció la generosidad de los pueblos del Bajo Aragón por ceder su turno que oficiosamente le correspondía a Agramón.
En esta presetación también se encontraban el presidente de la Asociación de Tamborileros de Agramón, Carlos Ruiz, que afirmó era un paso muy importante para la pedanía , pero que había que poner “manos a la obra” pues era poco tiempo para hacer muchas cosas, y la pedánea, Celia Bláquez, que aseguró que para Agramón era un ran orgullo esta nueva designación y que esperaban no defraudar en todos los que habían depositado de nuevo su confianza en los agramoneros.
