Cuando se llevaban a cabo las últimas elecciones municipales, en el mes de mayo del 2015, se comprobaba que, por el resultado tan ajustado que existía entre el PSOE y el PP, los socialistas, si querían gobernar el Ayuntamiento en mayoría, estaban obligados a firmar un pacto de gobierno con la coalición de IU- Ganemos, cuya lista encabezaba, Beatriz Jiménez, una profesora casi desconocida en el mundo de la política local, a la que acompañaría en el sillón del salón de sesiones de la Casa Consistorial, Francisco Javier Morcillo, todo lo contrario por su ya dilatada experiencia en estos lares, como número dos.
Y así, días después llegaba el acuerdo: Beatriz se ocuparía del departamento de Cultura, que viene desarrollando con discreción y eficacia, mientras que Morcillo, como liberado a tiempo completo y un sueldo de 2.400 euros brutos, acaparaba las concejalías de Comercio, Industria, Turismo y Participación Ciudadana, que bien está explotando, buscando un protagonismo desmesurado, que ha llegado a molestar, según fuentes generalmente bien informadas, a sus compañeros de viaje.
Hasta hace unos pocas semanas todo se ha ido desarrollado como imaginábamos que se habían planteado en el documento, aparte esos rumores que nos llegaban del malestar que podía existir en el núcleo duro del PSOE, por el ya nombrado protagonismo del concejal de IU e incluso el alejamiento con su compañera de coalición, algo que es fácil de imaginar por la postura que ambos muestran en las sesiones.
Pero llegó la sesión ordinaria del pasado mes de octubre, cuando, ante la sorpresa de muchos de los asistentes, los ediles de IU votaban repetidas veces en contra en algunas de las propuestas del equipo de gobierno en el que están integrados. El primer punto fue el levantamiento de reparo interpuesto por Intervención, sobre la ampliación de gastos referidos a la pasada Feria, por un montante de 45.000 euros, para seguir con este mismo camino votando en contra los dos expedientes de modificación de Créditos por Suplementos de Créditos.
Aquella sesión, que mostró este cambio de criterios tuvo más discrepancias ya que los ediles de la coalición siguieron votando en contra ahora en el punto que trataba de la aprobación en materia de horas extra del personal laboral y funcionario del Ayuntamiento, propuesta que salía adelante con los votos del PSOE y la abstención de Ciudadanos y PP.
Por último hubo “cumplida venganza” de sus compañeros de equipo gubernamental, al echar por tierra las pretensiones de Morcillo de no cambiar de ubicación el mercadillo de los miércoles después de la celebración de la Feria, asunto que quedó sobre la mesa.
La extraña pareja
Con estas circunstancias se tuvo que convocar, dos semanas más tarde, una sesión extraordinaria para trata de nuevo estos asuntos , que como es lógico estuvo precedida por varias reuniones en la alcaldía, para “limar asperezas”. Así se aprobaba el levantamiento del reparo de Intervención para aprobar el gasto extra de 45.000 euros, con la abstención de IU y PP, mientras Ciudadano apoyaba al PSOE; la modificación de los créditos, esta vez por unanimidad, a cambio; también salía hacia adelante la propuesta de Morcillo sobre la modificación de la ubicación del mercadillo de los miércoles, con la abstención del PP.
Ahora no habrá que esperar mucho, para el próximo lunes ya está convocado la sesión plenaria correspondiente al mes de noviembre, para ver cómo se desarrollan los acontecimientos y conocer cuál es la postura de “la extraña pareja “, teniendo en cuenta que aún queda más de un año y medio para que finalice esta legislatura.
