Y abre sus puertas para aquellas mujeres víctimas de violencia de género que necesiten apoyo, formación o estén en búsqueda activa de empleo
Desde FEDA nos llega un comunicado donde se recuerda qué como cada 25 de noviembre, el equipo técnico de FEDA, acompañado del presidente y vicepresidenta de la Confederación, guarda un minuto de silencio en memoria de todas las mujeres víctimas de violencia de género. Tanto en su sede principal como en sus delegaciones, sumando a las empresas y personas que se encuentren en alguna actividad organizada en la Confederación.
Asimismo, desde FEDA, se considera fundamental concienciar a la sociedad de la problemática que supone la violencia de género y lo fundamental de solidarizarse con sus víctimas. La Confederación promueve este mensaje entre su importante base asociativa, pero también entre las personas jóvenes y mayores que acuden a sus cursos de formación.
Con este minuto de silencio, FEDA reitera su rechazo a cualquier tipo de discriminación o práctica de violencia hacia la mujer. Invitando a las que se encuentren en esta situación a entender FEDA como un espacio seguro donde pueden encontrar apoyo, formación o ayuda en la búsqueda activa de empleo.
Toda acción por pequeña que sea, puede tener un impacto positivo. FEDA renueva su compromiso inquebrantable por una sociedad libre de violencia de género, demostrando el potencial que las organizaciones empresariales poseen como agentes de transformación social.
Su trabajo coordinado con la Administración y los sindicatos, en el marco del diálogo social, ha permitido sacar adelante el Observatorio Provincial de Igualdad en las Relaciones Laborales, que tiene dentro de sus objetivos la sensibilización frente a la eliminación de la violencia de género. El OPI está promovido por CCOO, UGT y FEDA y con el apoyo institucional de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la Diputación Provincial, el Ayuntamiento de Albacete desde sus áreas representativas en materia de Igualdad. FEDA tiene como reto visibilizar en el marco de sus actuaciones internas y externas que las empresas son agentes de cambio y que desempeñan un papel decisivo en la erradicación de la violencia de género.
