Para poner inicio a las Fiestas en honor de San Rafael, Patrón de la ciudad
En la tarde del pasado sábado, como señal de apertura de las fiestas en honor a San Rafael, el Patrón de la ciudad, el compañero en las tareas de la información, actualmente jubilado, Ángel Romero, pronunciaba desde el balcón del Ayuntamiento el pregón de dichas fiestas
Tras las palabras de presentación de otra compañera en estas ingrata tareas, Lourdes Gómez, el que ha sido durante muchos años corresponsal del diario albaceteño La Tribuna, quiso saludar a la Corporación Local allí presente, encabezada por el alcalde Ramón, García, como también a Antonio Martínez, presidente de la Asociación Cultural de Castilla-La Mancha, y a la Cofradía del Patrón, encargada de los actos religiosos reflejados en el programa.
No faltó en sus palabras el reconocimiento al cuerpo de la Policía Local que también camina bajo su advocación y lleva a cabo actos de su onomástica en estas fechas.
Ángel Romero continuaba sus palabras destacando, de manera significativa, la oferta que para los hellineros y visitantes representaba un año más el Mercado Medieval “que en nuestra ciudad tiene un escenario que difícilmente puede darse en otros lugares, ya que las calles del casco antiguo ponen un marco inigualable para su celebración”.
Más adelante realizó una descripción muy acertada sobre el contenido variopinto que podían encontrar las personas que se acercarán a contemplar sus distintas puestos, que llenaban la Plaza de la Iglesia, las calles adyacentes, en especial en la Plazuela de la Monjas Claras.
Verdadera joya de la ciudad
El pregonero, en este momento, quiso hacer un inciso en su narración, para romper una lanza por la preservación del casco histórico “verdadera joya de esta ciudad que continúa existiendo a través del paso de los siglos y de esta manera nos ha permitido conocer los orígenes urbanos locales”.
Tras pedir a las autoridades que no escatimaran esfuerzos para ayudar a la recuperación y conservación de toda esta zona, subrayando que ya existían iniciativas ciudadanas se van realizando acciones de limpieza y ornamentación, hizo un llamamiento a la reflexión a las que, por lo contrario, parecer no importarles que “este testigo de nuestro pasado colectivo se preserve en las mejores condiciones”.
Romero terminaba su pregón animando a los hellineros a participar en todas las actividades programadas y en especial cuando llegase la tarde del lunes, Día de San Rafael, que fueran muchos los que acompañarán a su imagen “a través de las estrechas calles blancas cargadas con retazos de nuestra historia, que desembocarán finalmente frente a la blanca iglesia”.
