Esta área representa un tercio de la superficie total de arroz de la DOP Calasparra, con enfoque en la pedanía de Las Minas
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, ha destacado la importancia de la vega arrocera de Hellín. Esta vega representa un tercio de toda la superficie de arroz cultivada en la DOP de Calasparra, especialmente en la pedanía de Las Minas.
El político hellinero hizo estas declaraciones durante su visita a la pedanía de Hellín, donde asistió a la siega del cultivo junto al presidente del Consejo Regulador de la DOP Arroz de Calasparra, José Martínez. Martínez enfatizó la importancia del arroz en todas las sociedades y afirmó que el arroz de Calasparra es uno de los tres únicos arroces con denominación de origen en España. Además, añadió: “Me permito decir que tenemos el mejor arroz en cuanto a calidad en toda España”.
Adicionalmente, Martínez señaló que el Gobierno de Castilla-La Mancha está colaborando con los productores de arroz en Hellín para incluir el arroz con Denominación de Origen Protegida (DOP) Calasparra en la marca ‘Campo y Alma’. Esto ayudaría a promocionar el producto como una calidad diferenciada de la región y agregar un mayor valor a las producciones.
El arroz de Calasparra se destaca por su calidad en toda España y se cultiva en tres localidades que abarca la DO: Moratalla y Calasparra en la provincia de Murcia, y Hellín en la provincia de Albacete. Hellín es la localidad donde se cultiva un tercio de toda la superficie de esta Denominación, especialmente en el coto arrocero de la pedanía de Las Minas, convirtiendo a Hellín en el único municipio de Castilla-La Mancha con arroceras de calidad diferenciada.
La DO Calasparra abarca alrededor de 1,200 hectáreas, de las cuales aproximadamente la mitad se cultivan en 2023, con casi 130 hectáreas en la vega arrocera de Hellín. Esta área también es importante para la conservación de la diversidad biológica y forma parte de la Red Natura 2000. La producción anual de arroz ronda los tres millones de kilos. Por lo tanto, el consejero reafirmó la apuesta por este cultivo tradicional, que tiene un futuro prometedor debido a su importancia como alimento esencial en todo el mundo, junto con su calidad.
El arroz de Calasparra se diferencia por ser un “arroz de montaña”, ya que las parcelas del coto arrocero se encuentran entre 350 y 500 metros sobre el nivel del mar, a diferencia de otras zonas arroceras de España que se sitúan en las desembocaduras de los ríos y cerca del mar. Además, el cultivo no se realiza en aguas estancadas, sino que utiliza las aguas del río de manera renovable.
Desde una perspectiva económica, el arroz de Calasparra impulsa la economía de la zona, ya que muchas familias se dedican principalmente al cultivo de este cereal.
En resumen, el arroz de Calasparra es valorado por su calidad, tradición y relevancia cultural en Castilla-La Mancha, especialmente en las Vegas de los ríos Mundo y Segura en Hellín.
