Emilio José Pinar Peñafiel
Concejal de Servicios Sociales
Secretario de Bienestar Social PSOE Hellín
Durante los últimos días hemos asistido, unos convencidos de que era un acto de justicia social, y otros convencidos de nos encontrábamos ante una decisión errónea que perjudicaba a los intereses de España, al rescate de las 629 personas que se encontraban en medio del Mediterráneo a la espera de poder ser acogidos por algún país.
Italia y Malta, países más próximos a la situación del Acuarius, niegan que el barco pueda atracar en sus puertos y con ello poder salvar la vida de niños, mujeres embarazadas y hombres, todos ellos PERSONAS (como tú, que lees, y como yo, que escribo) que huyen de la miseria, el hambre, la guerra. PERSONAS que buscan, no solo un futuro mejor o más cómodo, sino que luchan por salvar la vida.
La situación de los países de África, los conflictos, el hambre, etc, no son solo responsabilidad de estos países, sino de la acción u omisión de acción de los gobiernos de los países europeos, americanos, rusos, en definitiva de los llamados países “desarrollados”, que manejamos a nuestro antojo nuestros intereses, más allá de los recursos, personas o necesidades de los propios países. Situaciones que sangran durante décadas, Nigeria, Libáno, Sudan, países del Cuerno de África, Libia, Afganistán, Irak… y un largo etcétera de países, en los que solo cabe dos opciones, enfrentarse diariamente a la muerte o enfrentarse a la muerte con la esperanza de alcanzar las costas del otro lado del Mediterráneo.
Y ante esta situación, injusta, hemos visto diariamente como algunos gobiernos, entre ellos el del Partido Popular, miraban hacia otro lado, haciendo caso omiso de las recomendaciones de la ONU sobre los refugiados, dejando a su suerte a las miles de personas que se hayan en tierra de nadie. Pero no solo eso, sino que a todos los Municipios que se declararon Ciudad Refugio (Hellín el 7 de septiembre de 2015) los desoyeron y dando un golpe en la mesa, olvidaron que las PERSONAS, independientemente de su procedencia, siempre tienen derecho a vivir.
Pero independientemente del acto de justicia y solidaridad, llevado a cabo por Pedro Sánchez al ofrecer a España, y que ha despertado la solidaridad de muchas comunidades Autónomas y Ayuntamientos, ha sido triste leer comentarios en las diferentes redes sociales sobre si los inmigrantes vienen a robarnos el trabajo, a vivir de las ayudas, que si los españoles primero… opiniones carentes de objetividad, de realidad y sobre todo de solidaridad. Es triste, que cuando está más que comprobado que España, y el resto de países de la UE, necesitan de la mano de obra de PERSONAS, provenientes de otros países, para seguir manteniendo nuestros estándares de bienestar, surjan de muchas personas estos brotes de xenofobia, racismo, etc.
629 PERSONAS, no han muerto gracias a una decisión de un presidente, Pedro Sánchez, que oyó el SOS y entendió, que ellos también eran personas.
